¡Buenos dias !
Hoy vuelvo a escribirles desde el avión… llevo en él unas cuatro horas. Despegué sobre las once de la mañana y ahora mismo donde voy a aterrizar son las 11:16 am. Dos amaneceres en un mismo día. Creo que es una de las cosas mas bonitas que he visto en mi vida.
Desde tu ventana puedes mirar hacia afuera y tan solo observar los colores, intuir el silencio, el vacío lleno de libertad. Aquí arriba solos tu, el aire, la presión y las nubes.
Las veces que he tenido la oportunidad de verlo y vivirlo, creo que hasta alguna lágrima solté ( creo, por aquello de mantener la compostura 
). Lo mismo pasa con el anochecer. Para ir a Copenhague me escogieron el ultimo vuelo que salía de Nueva York, lo que yo no sabía es que estaba siendo muy afortunada. Tras unas horas de haber despegado, deduzco que andábamos en medio de la nada, las turbulencias empezaron a hacerse notar. Ese meneo incómodo que a primeras te hace hasta gracia y de repente empiezas a encogerte, mirar a las azafatas y ponerte un poquito nerviosa. Eso sí, nadie lo nota.
Una vez vuelve todo a la normalidad, te relajas e incluso te creces. Así fue como pasó. Mandaron a cerrar todas las ventanillas. ¿Por qué? O estábamos volando por alguna zona llena de OVNIS y queríamos hacernos los locos, o algo raro estaba pasando.
Por supuesto nadie iba a decírmelo, así que yo subí un poquito la ventanilla y poniéndome la bufanda por encima, pegué el ojo ( den por seguro que ningún objeto extraño se encontraba ahí afuera y menos mal porque no lo habría superado en la vida ) BABOOM !! un espectáculo astronómico.
Millones de estrellas brillando, cada cual mas grande y hermosa. No podía parar de mirarlas. Solo una vez las había visto tan claras pero no tan cerca. Aqui podía casi tocarlas. Y solo tuve que esperar unos minutos para ver pasar un par de estrellas fugaces.
Sobrevivir a los viajes no es tarea fácil. La comida, los aviones, el aire acondicionado, los horarios de nuevo… creo que poco a poco voy consiguiendo la clave.
Ya que estoy en un avión, voy a darles algunos “consejos” que a mi me funcionan y ustedes comprobaran si les viene bien o no
Dure lo que dure el vuelo, estaremos sentados, con las piernas cruzadas o de alguna manera no muy recomendable. Estas posiciones para la circulación nos vienen bastante mal, por lo que antes de coger un avión me gusta hacer algo de deporte, caminar, etc. Siempre depende de la hora del vuelo pero si es viable ¡HAZLO! Una carrerita de media hora, unos estiramientos, es perfecto.
- Ser precavido con las comidas.
Hacernos un tentempié en casa nos asegura llegar al avión y no tirar del carrito de la azafata como si fueran las ofertas del Carrefour.
Suelen ser snacks dulces, grasientos y llenos de sal.
Justo los nutrientes menos recomendables cuando nos encontramos dentro de un avión. La presión, deshidratación, la altitud; todos estos factores hacen que necesitemos estar durante todo el vuelo bien hidratados.
Olvidarnos de las bebidas gaseosas azucaradas y llenas de sodio ( sal). El acohol tampoco es recomendable, aunque en vuelos largos, una copita de vino tinto no viene mal para conciliar el sueño, además es bueno para la circulación.
Mi menú a bordo :
-piña en trocitos, melón o la fruta que esté en temporada. Uvas, manzanas, un plátano, mandarinas.
- zanahorias babys ya peladas y listas para comer.
- tortas de arroz sin sal o de espelta.
- almendras tostadas sin sal, nueces.
Cuando cojo el vuelo a la hora de comer, mi receta preferida es la ensalada de quinoa con aguacate, rucula, nueces y guisantes o atún. Son alimentos que aguantan bien las temperaturas, no se ponen malos y cuando vez al de al lado tomarse esa sopa en polvo con noodles de plásticos, miras tu ensalada y ¡te vuelves a enamorar de ti mismo!
Un clásico entre los clásicos : prepararte un buen bocadillo, de pan e ingredientes al gusto.
No cuesta nada, te robará unos minutos de tu tiempo y después lo agradecerás.
Siempre tener una botella de agua cerca e ir bebiendo poco a poco. Ayudará a mantenernos hidratados y a reducir posibles dolores de cabeza al llegar o durante el mismo vuelo. Es por esto que se recomienda hacer comidas ligeras, ricas en frutas y verduras frescas.
Otro detalle muy importante que empecé a hacer hace poco : hidratar bien la piel. Aunque queda pringosa, es asombroso como se absorbe todo una vez cogemos altitud.
Mis preferidas son la ” Eight hours de Elizabeth Arden” y “Mango Nourishing Balm” de Natura Bissé. Ambas son reparadores balsámicos. Perfectas para volar !
Otras recomendaciones :
Levantarnos del asiento al menos una o dos veces. Estirar las piernas, doblarlas y volverlas a estirar. Igual con los brazos; mover el cuello. Pequeños movimientos que den vida a la circulación.
Una vez lleguemos a nuestro destino, vuelvo a recomendar dar un paseo aunque sea de 15 minutos. Coger un poco de aire, reactivar todo nuestro cuerpo y prepararlo para lo que tengamos que hacer. ( dormir, trabajar, pasear…lo que sea 
)
Espero que les ayude un poquito en los próximos viajes !!
A mi me funciona y si nos encontramos perezosos o no nos da tiempo, intenten buscar los mismos snack de casa en el aeropuerto.
un abrazo enorme!!
Ya solo me quedan dos horas más !! Yejeiiii
